PENSAMIENTOS DEMOLIDOS DE UN DOMINGO DE FEBRERO DE 2020

La entrega de los Oscar, la Superliga, la Naturaleza como gran restaurante, la guerra de clases, las primeras y difíciles semanas del gobierno de Alberto Fernández, todo en una excursión por las ruinas de pensamientos más impresionistas que rigurosos, agradeciendo a Thurston Moore de Sonic Youth por la idea del título (?). Auspicia estas líneas la Escuela de Actuación de Tommy Wiseau. ¡Vacantes limitadas! Escuela de Actuación de Tommy Wiseau, Avenida Mariscal De la Derrota esquina Milanesa a la Napolitana, Lomas del Morcillar.

- Hola. Che ¿qué hacés esta noche? Vénganse que me regalaron unas Mecklenburger alemanas, pedimos una pizza grande y cenamos.

- ¿No van a ver la entrega de los Oscar?

- Mirá, sabés que con la flaca nos gusta el cine pero, la verdad, una entrega de premios.... Encima concebida básicamente como ejercicio de relaciones públicas de las corporaciones dueñas de Hollywood. Bah, no sé por qué me atajo de entrada con lo de que nos gusta el cine, como si la entrega del Oscar tuviera algo que ver. Aparte River se juega el liderazgo en solitario.

- Ah, cierto que River juega a última hora. No va a ser sencillo Unión en Santa Fe. De hecho, no sé por qué las personas en situación de periodismo deportivo televisivo dicen que River tiene el programa de partidos más sencillo. Le toca ser visitante en Santa Fe, jugar en La Plata con Estudiantes y cierra con Atlético en Tucumán. A Boca en cambio le quedan Central Córdoba, Godoy Cruz, Colón y Gimnasia. Me parece imposible que pierda un solo punto: va a meter mucha presión de atrás.

- Sí, y acordate además que el talón de Aquiles de River son los partidos de local, así que guarda con Banfield y Defensa y Justicia también, que parecen los partidos más fáciles. Pero por algo todos creen que a River le quedan partidos que debiera ganar: es el respeto que se ganó el equipo del Muñeco. Al equipo le dicen que tienen que visitar a Independiente en una cancha donde hace años que no gana, o jugar más de una hora con un futbolista menos, y ni se despeina. Gallardo ya tiene todo calculado, hasta el riñón.

- Hasta el riñón. Siempre hay riesgos después de todo: el Indio Solari dice que la Naturaleza es un gran restaurante. La sociedad no es muy diferente, tampoco: hay rugbiers a los que matar les gusta más que marcar un try, hay predadores de billeteras distraídas, hay cerdos y perros y ovejas, y lobos de Wall Street, y familias Park y familias Kim, y un Arthur Fleck y un Thomas Wayne y...

- ... y estados nacionales y corporaciones financieras que sostienen sectas ultraliberales que buscan llegar al gobierno para destruirlo desde dentro, porque lo odian. Nos odian. Película que ya vi tres veces en cuatro décadas: con Martínez de Hoz y la dictadura, con Cavallo y el menemismo y la Alianza y con esta última horda de chetos que se escondía detrás de globos amarillos, billetes con animalitos, beboteos de la Mariu y un muro de complicidad mediática que no se había visto nunca en democracia. El macrismo fue el coronavirus del bolsillo de las mayorías.

- Jodido todo. Encima el gobierno de Alberto empieza recién en abril: no por nada actúa con tanta cautela, con una evidente vocación por no hacer olas. En marzo se juega el destino de los próximos años con la renegociación de la deuda externa. Ahí recién se va a saber qué plata nos vamos a ahorrar de desembolsar y vamos a tener disponible para hacer algo parecido a gobernar un país al que no odiamos, todo lo contrario.

- Hasta entonces estaremos a puro parche. A nadie le gusta pero es lo que hay: limpiar una casa después de una fiesta ajena.

- Una fiesta ajena pero que se celebró en tu casa, te vaciaron la heladera, te taparon el inodoro y te dejaron todo hecho un desastre.

- Además existe incluso el riesgo de que todo salga mal, hasta esta prudencia que por momentos se pone medio incómoda. Acá proponés un acuerdo de precios y a tus espaldas te aumentan hasta las bolsas de supermercado, te ponés serio y lloran que dictadura, comunismo y Venezuela. Es todo muy difícil.

- No hay opción sin riesgo en el contexto ruinoso que dejó Macri.

- Ahí empezó el vecino a cortar azulejos en plena siesta, esperá que tengo que cerrar las ventanas. ¿A eso de las ocho y media, nueve?

- Dale, ahí estaremos. Chau.

- Chau.

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